Más allá del hype: descubriendo el verdadero valor de la IA

En un momento en que IA se ha convertido en sinónimo de promesa infinita —una especie de mantra tecnológico—, el artículo de Wharton “What’s the Real Value of AI?” llega con dosis de realismo necesario.
No es un texto escéptico: reconoce que la IA ya entrega valor real, pero señala que muchas empresas aún no han capturado ese valor.
Su lección principal: la verdadera ventaja competitiva no está en tener IA, sino en saber monetizarla, personalizarla y escalarla con sentido.

¿Dónde yace el valor real de la IA?

El artículo identifica algunos focos donde la IA ya está marcando la diferencia:

  • Productividad de desarrolladores: herramientas como GitHub Copilot liberan recursos humanos escasos

  • Personalización escalable: la IA permite adaptar productos a segmentos específicos

  • Monetización incipiente: muchas empresas mejoran operaciones, pero aún no convierten eso en nuevas líneas de ingresos

Obstáculos invisibles que frenan la IA real

Para pasar del piloto al impacto real, las empresas deben superar obstáculos humanos e institucionales:

  • Desalineación funcional entre equipos

  • Ventanas de ventaja corta (6-12 meses)

  • Riesgos de responsabilidad y ética (Wharton)

  • Gobernanza deficiente: sin controles, sesgos o límites claros

Tácticas para capitalizar la IA con madurez

Wharton sugiere seis estrategias prácticas:

  1. Especificar resultados esperados

  2. Proveer contexto y límites claros

  3. Iterar prompts y modelos

  4. Solicitar enfoques múltiples

  5. Medir con métricas relevantes

  6. Gobernar con responsabilidad (roles, revisores, auditorías)

Lo que Wharton y otros nos muestran: reflexiones para Latinoamérica

Combinando los hallazgos con el contexto latinoamericano y la atracción de IED, surgen lecciones clave:

  • IA como factor de atracción de inversión

  • Doble alfabetización: cognitiva y algorítmica

  • Redefinir el rol de los profesionales: co-creadores, no reemplazados

  • Medir la IA por transformación, no por adopción

  • Ventana corta para los primeros adoptantes

Un manifiesto inteligente para la IA con sentido

  1. No creer el hype: exigir métricas y evidencia

  2. Empoderar al humano: IA como aliada, no reemplazo

  3. Hacer la ética explícita

  4. Pensar en ecosistemas, no módulos aislados

  5. Invertir en talento híbrido

  6. Medir el impacto real: ingresos, eficiencia, satisfacción y bienestar

Epílogo: La IA como espejo de nuestra ambición

El valor real de la IA no está en su promesa, sino en su materialización consciente.
Wharton nos recuerda que no basta con tener herramientas: hay que diseñarlas, gobernarlas y escalar su uso con sentido.
Si América Latina logra asumir esta ambición, podrá redefinir su desarrollo mediante inversiones inteligentes, talentos híbridos y ecosistemas conscientes.

Como he reiterado muchas veces: no vinimos a complacer, sino a iluminar.
Que cada modelo de IA sea una expresión de esa luz, y no solo un reflejo del hype.

Sandro Zolezzi

Chileno-Costarricense. Ingeniero Civil-Industrial con énfasis en optimización de recursos de la Universidad de Chile, con una Maestría en Administración de Negocios con énfasis en economía y finanzas del INCAE Business School de Costa Rica.

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